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Miguel Colunga

Son un barril sin fondo

Hoy fue un día clave para muchos latinos y no latinos en Estados Unidos. El Presidente Barack Obama, desde El Paso, Texas, dirigió un mensaje bastante afilado a quienes lo critican por el tema migratorio.

La imagen de un Obama relajado, vistiendo una camisa blanca con las mangas levantadas, corbata azul y banderas norteamericanas ondeando detrás de él, fue el marco en el que hoy dirigió un mensaje decisivo para la obtención del voto latino rumbo a su reelección del 2012.

A mi parecer su mensaje se centró en tres ejes primordiales: migración; seguridad fronteriza; y oportunidades laborales en los Estados Unidos.

 

1.- Migración.- Fue bastante claro –y hasta cierto punto enérgico- cuando se refirió que en Estados Unidos los migrantes que respetan las leyes son recompensados, y quienes las violan son castigados. De cierta manera dio a entender que los migrantes son un mal necesario para el vecino país del norte. En este punto Obama arremetió contra los Republicanos, que son quienes tienen detenida la Reforma Migratoria en el senado. Invitó a los legisladores a “dejar de hacer política, y centrarse en las Reformas Migratorias”. Y remató: “No podemos seguir separando familias”.

 

2.- Seguridad Fronteriza.- Y qué mejor forma de hablar de este punto que el momento en que Barack Obama hizo un reconocimiento a la Secretaria de Seguridad Nacional Janet Napolitano, una de las principales impulsoras del fortalecimiento de la seguridad en la frontera con México. De ella, Obama dijo que gracias a su labor esa zona de la frontera era “una de las zonas más seguras”. Actualmente la patrulla fronteriza cuenta con 20 mil agentes, casi el doble de lo que había en 2004, fue otro de los reconocimientos al trabajo de Napolitano. Con ese ejército de agentes en los pasados dos años, según cifras, se deportaron unos 800 mil inmigrantes. Días atrás un grupo de congresistas republicanos encabezados por el presidente del Comité de Seguridad Interna, Peter King, le solicitaron a Obama que prorrogara la estancia de elementos de la Guardia Nacional en la frontera.

 

3.- Oportunidades laborales en los Estados Unidos.- El Presidente norteamericano no dejó pasar el tema de las aportaciones que hacen los  inmigrantes a la economía de los Estados Unidos. Por ello en su discurso dijo: “Quiero prosperidad, y quiero que este país sea compartido. Quiero que todo mundo pueda alcanzar el Sueño Americano. De ahí la importancia de la Reforma Migratoria”, sugirió Obama.

Las palabras del Presidente norteamericano no fueron al aire. En un reciente informe de abril, el Centro de Política Migratoria (IPC, por sus siglas en inglés), publicó un reporte llamado Unauthorized Immigrants Pay Taxes, Too. En él se da cuenta de que los inmigrantes aportan a las arcas yanquis 11.2 billones de dólares por concepto de impuestos. En otro informe del Counsil of Economic Advisers (CEA) se señala que los inmigrantes aportan más de 30 billones de dólares de ganancias a los trabajadores norteamericanos. El mismo documento de la CEA refleja otras realidades: los inmigrantes tienen menos probabilidades de cometer crímenes o terminar en prisión o que los inmigrantes tienen mejor rendimiento productivo en Estados Unidos.

Los cálculos de Washington son claros: si viviendo en la ilegalidad, al margen de la migra, los inmigrantes aportan esas cantidades de dinero, teniéndolos “al corriente”, la cifra crecería exponencialmente. Según cifras del primer trimestre del año del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), en el territorio norteamericano hay 10.8 millones de inmigrantes. Los mexicanos, como se sabe, representan el 62% de esa cifra. El censo 2010 reveló que existen 50.5 millones de hispanos legalmente radicados en Estados Unidos. El Pew Research Center, uno de los centros de investigación del tema migratorio más serios en la unión americana, consideró que el incremento en la población hispana fue más por el aumento de la natalidad, que por el tema migratorio.

 

También Obama ha sido severo con el tema migratorio. Ha expresado en ocasiones anteriores que es inútil que migrantes vivan y estudien en Estados Unidos, si al cabo del tiempo regresarán a sus países de origen para competir laboralmente con Estados Unidos.

 

Mi conclusión: Obama no se ha quedado de brazos cruzados con el tema migratorio. Tal vez con Bush hubo un brazo de hierro al respecto, al integrar el tema al Plan Mérida, aquel plan del cual ni el destino de su multimillonario presupuesto se conoce con certeza, pero que entre sus labores está el tema de la seguridad en la región con México. Obama ha cumplido muchos de los caprichos a los Republicanos, dicen varios especialistas. “Uno de los impedimentos para hacer esta Reforma era la seguridad de la frontera con México”, dijo Obama en su intervención en El Paso. Para muchos políticos demócratas, los republicanos son un barril sin fondo. Y hoy Obama demostró que no quiere ver a los republicanos haciendo grilla, y que quiere la presidencia del 2012.

Falta ver la respuesta de los Republicanos y del Tea Party, su ala ultra conservadora. Mientras tanto la organización Alianza Latina Republicana (creo que no necesitaría mucha presentación), acusa que en su discurso de hoy Obama se la pasó criticando a los Republicanos. “Nunca hizo sugerencias o postulados para hacer una mejor Reforma Migratoria”, dijeron a la prensa. Y fueron más allá: “Obama nunca se ha reunido con los líderes del tema en el Congreso. Así que lo de hoy es una táctica política”, señalaron. En lo que organizaciones de migrantes coinciden es que ya hay que pasar a la acción. Habrá tema migratorio para rato, y seguirá siendo una papa caliente electoral o social entre los norteamericanos.

 

 Twitter: @mikeonweb

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Publicado originalmente en redsiete.com.mx el 05/11/2011
Fuente original: http://redsiete.com.mx/node/103

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